Este de la foto es Mike, el Pollo Sin Cabeza. En 1945, Mike vivía tranquilamente en una granja hasta que un buen día recibió el hachazo que le dejó sin cabeza. Como al invitado que venía a cenar le gustaban especialmente los cuellos de pollo, la persona que lo decapitó dejó tanto cuello como le fue posible, y lo dejó por muerto hasta el día siguiente.

pollo_sin_cabeza_2Por la mañana, el ejecutor de Mike se encontró al pollo durmiendo junto a las demás gallinas, con su cuello bajo el ala. De alguna forma, a Mike le quedaba el suficiente tallo cerebral como para poder seguir viviendo. No tenía cabeza, pero rascaba y «picaba» el suelo, e incluso intentaba acicalarse las plumas. Sintiendo lástima, sus dueños decidieron cuidarlo y alimentarlo con un cuentagotas. La voz se corrió por los alrededores, y la gente incluso pagaba por verlo.

Mike creció grande y fuerte. Alcanzó más de 3,5 kg. de peso, viajó por todo el país y fue tal sensación que lo aseguraron por 10000 dólares. Lamentablemente, Mike era propenso a ahogarse y, aunque sus dueños le limpiaban normalmente sus conductos con el cuentagotas, una noche no lo encontraron.

Mike murió 18 meses después de su decapitación, pero su historia y su presencia en la web todavía perduran.